Síndrome de congestión pélvica es cuando las venas varicosas en la pelvis causan dolor. Al igual que aparecen en las piernas, las válvulas en las venas se debilitan y no cierran de manera apropiada, así que la sangre se encharca propiciando dolor.

El dolor es incómodo y punzante el la pelvis, frecuentemente descrito como una sensación pesada. Las molestias desaparecen o es leve en la mañana y se pone peor a lo largo del día. Mejora cuando te recuestas o aplicas calor.

El dolor pélvico crónico afecta generalmente a mujeres entre 30 y 50 años, en casi todos los casos con uno o más embarazos, de manera casi continúa pero con intensidad variable.

Síntomas y tratamiento

Reglas dolorosas y abundantes con posibles alteraciones de su periodicidad son un primer síntoma de Síndrome de Congestión Pélvica. En algunos casos pueden causar trastornos hormonales, de fertilidad e incluso coitos dolorosos en mujeres jóvenes acompañadas de sensación de distensión. Esta patología puede también ser el origen de alteraciones del ritmo de las deposiciones. En estos casos y si se acompañan de la aparición de unos trayectos venosos visibles en la pared abdominal baja y a nivel de las ingles se realiza un estudio ecodoppler para confirmar el Síndrome de Congestión Pélvica. Una vez se confirman y localizan las de varices pélvicas, se procede a la oclusión de las venas patológicas con la finalidad de que al disminuir/desaparecer el flujo anómalo de su interior, cese la hipertensión a la que están sometidas las venas del pleno útero-ovárico y desaparezcan las molestias.

Se ha podido comprobar que la mejoría/desaparición de dichas molestias se produce en un 80% aproximadamente de las pacientes tratadas. Esta técnica totalmente ambulatoria y realizada bajo anestesia local, sustituye al tratamiento quirúrgico consistente en la ligadura de la (las) venas ováricas, realizado en épocas anteriores.

Al tratarse de una punción endovenosa como las que se realizan para la extracción de sangre en los estudios analíticos, han desaparecido todas las complicaciones propias de los tratamientos que se realizaban mediante cirugía.