Para el sano consumo de pescados y mariscos es mejor seguir estas recomendaciones
Existen una gran cantidad de especies marítimas y en consecuencia durante todo el año se puede encontrar en el mercado una amplia variedad de especies sabrosas y económicas. No es necesario el consumo de pescados o mariscos de los más caros.
En general el pescado aporta a nuestro organismo ácidos grasos poliinsaturados, omega 3 y omega 6, son grasa que contribuyen a la prevención del desarrollo de enfermedades cardiovasculares, ayudando a limpiar las venas y las arterias. A su vez los camarones tienen la fama de que contienen mucho colesterol, pero tienen el beneficio de contener estas grasas saludables, omega 3 y omega 6.
El pescado y marisco debe estar presente en nuestra dieta pero a la hora de las compras para el consumo es necesario asegurarnos estar realizando la mejor adquisición.
Para saber si un pescado es fresco debemos tomar en consideración varios detalles.
- El olor, un pescado que no está fresco despide un olor fácilmente identificable.
- Los ojos, no deben verse opacos, lo contrario deben ser brillantes, cristalinos y saltones.
- Las agallas por donde respiran los pescados deben estar rosadas o rojas, el olor no debe ser desagradable.
- La carne fresca es firme y elástica, si la tocamos con un dedo debe regresar inmediatamente a su lugar, al tacto no debe quedarse marcada la huella.
- Si aun tiene escamas deben ser brillantes y deben estar pegadas, para nada levantadas,
- Si tu interés es consumir pescado en filete, tajas o porciones, asegúrese de que tenga un aspecto firme y limpio.
- Si aun desconfía de la frescura del pescado que adquirió, póngalo en un reciente con agua fría, si se trata de carne fresca se hundirá pero si flota, es mejor no consumirlo.
Después de las compras es recomendable remojar el pescado durante 10 minutos en una solución de agua, cloro y hielo; posteriormente, enjuagarlo con agua hervida.
Guardar de inmediato el pescado en el refrigerador; no dejarlo nunca afuera y cocinarlo dentro de los dos días siguientes a su compra. De preferencia, envolverlo en papel de estraza, aluminio o encerado.
El pescado que se encuentra en congelación se puede conservar hasta un mes y medio.