Comida rápida sinónimo de un alto costo
Consumir comida rápida nos lleva a enfermedades crónicas que más tarde se convierten en visitas al médico, que nos quitara tiempo y dinero y dependiendo el padecimiento hasta la perdida del empleo siendo un poco mas extremos hasta de la vida. Si se crees que comer sano es caro, es una gran equivocación.
Cuando se están consumiendo alimentos poco saludables se abre las puertas para problemas de salud. Las consecuencias pueden aparecer en forma de obesidad, índice de masa corporal elevada, problemas respiratorios, cintura extragrande, que a su vez conduce a una mayor probabilidad de accidentes cerebrovasculares y ataques cardíacos.
Las papas fritas, las hamburguesas y pizzas o sea la comida rápida es muy mala para la salud, pero su rapidez, buen sabor y facilidad de preparación, nos seduce. Diversos estudios han dado a conocer el peligro que existe después de ver los resultado en sus investigaciones, descubriendo que la comida rápida causa una adicción tan fuerte que solo se puede comparar con la adicción al tabaco o a las drogas.
Consecuencias del consumo de comida rápida:
- Incremento de peso por la sobrealimentación de grasas y carbohidratos, su consumo cotidiano se traduce en obesidad.
- Lento deterioro de la salud, la comida rápida proporciona una baja o nula cantidad de nutrientes que puedan alimentar a las células.
- También, por la falta de fibra, verduras y frutas, aparece el estreñimiento.
- Al no haber aportes de calcio e incrementarse las fuentes de azúcares simples, las caries se hacen más frecuentes.
- La digestión en general se vuelve más pesada y pueden aparecer los primeros problemas de mala digestión y gases que con el tiempo degeneran en gastritis o cáncer.
- De otro lado, las grasas sobre saturadas con se preparan estas comidas se vuelven muy difíciles de procesar para el hígado, debilitándolo y desarrollando enfermedades como la hepatitis que a la larga puede producirnos cirrosis.
- Su consumo a diario provoca cambios en el sentido del gusto por el exceso de sal, conservantes y sazonadores.
Al consumir comida rápida diariamente puede alterar seriamente la salud; sin embargo, si lo reducimos progresivamente y se consume más frutas, verduras y agua natural, podremos mantener un mejor estado de salud, y cuidar nuestra vida.